Mensaje
Mensual de Nuestra Madre Amantísima para todos sus Hijos
Diciembre
13, 2014
“Vuestra
Madre Amantísima está hoy aquí desde el amanecer y está escuchando las
peticiones de cada uno de vosotros. La
Virgen sabe que cada uno de vosotros están atentos a que vuestra Madre os del
Mensaje, pero para el bien del santuario Mariano, hoy están los sacerdotes
ofreciendo Misa. Vosotros sabéis
que vuestra Madre, la Virgen María, no los va interrumpir.
Vosotros sabéis que la Iglesia no acepta muchas apariciones Marianas y
por eso debéis dar gracias a Dios porque estos sacerdotes vienen a este lugar a
ofrecer la Sagrada Eucaristía.
“Vuestra
Madre Amantísima, la Virgen María, a través de Jesús os dice que muchos
acontecimientos van a pasar en el mundo, y que vosotros debéis estar atentos a
todo lo que pasará por vuestras acciones. El
hombre no se da cuenta que vuestro Padre Celestial está enviando a vuestra
Madre Amantísima al mundo entero. En
las apariciones Marianas vuestra Madre trae de nuevo al redil, a la Iglesia, el
pueblo que está disperso en todas partes.
“Vuestra
Madre Amantísima aparece en muchas partes del mundo para recoger el rebaño que
está disperso, porque hasta la misma Iglesia lo ha dispersado por no aceptar
las apariciones Marianas. Vosotros
sabéis que vuestra Madre es universal. Hay
una sola Virgen María que aparece bajo diferentes advocaciones en cada lugar
donde Ella aparece. Vuestra Madre
acompaña a todos aquellos que verdaderamente La veneran y Ella internamente os
habla y escucha vuestras peticiones donde quiera que vosotros estéis.
Vosotros podéis orar en cada momento; incluso cuando vosotros están
manejando un auto, como vosotros llamáis, ahí mentalmente podéis orar.
“Cada
vez que vosotros veis a un mendigo pidiendo limosna o sentado debajo de un
puente, ahí está Jesús en cada uno de ellos, y según vuestras acciones, Jesús
conocerá los corazones de cada uno de vosotros.
Si vosotros tenéis piedad con los más necesitados del mundo, recibiréis
muchas bendiciones. Cada vez que
vosotros dad una limosna de alimento a un necesitado por las calles por donde
vosotros conducen, se lo dan a Jesús. En
cada mendigo está el Bien Amado Jesús. En
cada niño está el Divino Niño. Vosotros
debéis darte cuenta que si vosotros pasan por ellos indiferente, estáis siendo
indiferentes con el Bien Amado Jesús.
“El
Bien Amado Jesús os pone a prueba a través de cada mendigo para ver si vuestro
corazón está abierto al amor, a la caridad.
Jesús verá cómo reacciona su corazón.
Vosotros no debéis pensar en que va usar el mendigo.
Como es obra de caridad, debe darlo con amor, por amor del Bien Amado Jesús.
“Vuestra
Madre os pide que se apiaden de los incapacitados y que ayuden a todos aquellos
que no tienen nada. Visiten a los
enfermos en los hospitales; hagan oración por cada uno de ellos.
Aunque no tengan el poder de la unción, ahí el Bien Amado Jesús ve la
caridad de sus corazones y hace el milagro.
Nadie es especialista en nada; la pequeña criatura [Rosa] no es la única
que puede ungir a los demás. Sólo
debe tener amor en vuestro corazón y el deseo para dejar que el Bien Amado Jesús
y la Madre Amantísima hagan el milagro. El
mundo va a cambiar cuando caridad se apodera de los corazones de los seres
humanos y nadie discrimina a nadie más, blanco o negro, mudo o incapacitado,
porque Jesús y María están en cada persona.
“Vosotros
debéis orar a vuestra Madre Amantísima antes de ir a dormir y cuando os
despierta. Dad gracias por un nuevo
día, para su familia, para sus hijos. No
debéis pedir mucho, pero debéis dar gracias a Dios por todo lo que tenéis,
porque hay muchos que no tienen nada. Algunas
personas ni siquiera sois capaz de hablar, por lo que deben estar agradecidos
por todo lo que tiene.
“Vuestra
Madre Amantísima viene buscando por el rebaño perdido, a los que están falto
de fe. Ella está buscando el amor
que muchos no siente hacia Jesús o hacia vuestra Madre Amantísima, la Virgen
María. Aunque vosotros no lo creéis,
Jesús y María están en cada corazón de cada ser humano, tocándoos para
saber cómo van a reaccionar.
“La pequeña criatura está muy feliz porque los sacerdotes han estado
en este lugar. Aunque la Iglesia
rechaza muchas apariciones, sin embargo la pequeña criatura ama la Iglesia
porque es parte de ella. Vosotros
debéis estar contentos porque los sacerdotes hoy vinieron a ofrecer la Eucaristía
a todo el rebaño en este pequeño lugar donde su Madre escogió aparecer.
“Este lugar es un lugar de oración y de peticiones a Jesús y a
vuestra Madre Amantísima. No
importa qué clase de sufrimiento que vosotros podáis tener, ponerlo todo en
las Manos de vuestra Madre Amantísima así que Ella puede interceder por
vosotros. Abrid vuestros corazones y
orad con verdadera fe. El Bien Amado
Jesús os dice, ‘Aquel que tiene fe, recibirá.’
Jesús y María escuchan todos los que los invoca con fe.
Todos vosotros son los hijos que el Bien Amado Jesús dio a vuestra Madre
Amantísima cuando dijo, ‘Madre, he aquí Su hijo.
Juan, he aquí a vuestro Madre.’
“La
pequeña está sola; su familia no comparte con ella estos momentos de bendición.
Ellos no entienden que este lugar es de la Virgen Amantísima y del Bien
Amado Jesús. La pequeña criatura
está feliz por todas las personas que cada mes vienen a este pequeño lugar.
“Vuestra
Madre Amantísima os dice que Ella siempre estará aquí, y Ella dice, ‘Cuando
la pequeña parta, vuestra Virgen Amantísima permanecerá en vuestros corazones.’
Todos aquellos que vengan a este lugar y Le pidan de corazón, Vuestra
Madre siempre os escuchará.
“Os
amo y os bendigo en el Nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo.
Amen.”
December
9, 2014
Rosa
hizo la Señal de la Cruz y luego abrió la Santa Biblia, donde Dios reveló
este mensaje en la Primera
Carta de San Pedro, Capitulo 1, Versículos 13-25:
“Dios nos llama a una vida santa. Por
eso, estén preparados y usen de su buen juicio.
Pongan toda su esperanza en lo que Dios en su bondad les va a dar cuando
Jesucristo aparezca. Como hijos
obedientes, no vivan conforme a los deseos que tenían antes de conocer a Dios.
Al contrario, vivan de una manera completamente santa, porque Dios, que
los llamo, es santo; pues la Escritura dice: ‘Sean ustedes santos, porque yo
soy santo.’ Si ustedes llaman
‘Padre’ a Dios, que juzga a cada uno según sus hechos y sin hacer distinción
entre persona, deben mostrarle reverencia durante todo el tiempo que vivan en
este mundo. Pues Dios los ha salvado
a ustedes de la vida sin sentido que heredaron de sus antepasados; y ustedes
saben muy bien que el costo de esta salvación no se pagó con cosas
corruptibles, como el oro o la plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, que
fue ofrecido en sacrificio como un cordero sin defecto ni mancha.
Cristo había sido destinado para esto desde antes que el mundo fuera
creado, pero en estos tiempos últimos ha aparecido para bien de ustedes.
Por medio de Cristo, ustedes creen en Dios, el cual lo resucito y lo
glorifico; así que ustedes han puesto su fe y su esperanza en Dios.
Ahora ustedes, al obedecer al mensaje de la verdad, han purificado sus
almas para amar sinceramente a los hermanos.
Así que deben amarse unos a otros con corazón puro y con todas sus
fuerzas. Pues ustedes han vuelto a
nacer, y esta vez no de padres humanos y mortales, sino de la palabra de Dios,
la cual vive y permanece para siempre. Porque
la Escritura dice: ‘Todo hombre es como hierba, y su grandeza es como la flor
de la hierba. La hierba se seca y la
flor se cae, pero la palabra del Señor permanece para siempre.’
Y esta palabra es el mensaje de salvación que se les ha anunciado a
ustedes.”
“Entonces, Rosa lee desde Capitulo
2, Versículos 1-3: “Por lo
tanto, abandonen toda clase de maldad, todo engaño, hipocresía y envidia, y
toda clase de chismes. Como niños
recién nacidos, busquen con ansia la leche espiritual pura, para que por medio
de ella crezcan y tengan salvación, si es que realmente han llegado a darse
cuenta de que el Señor es bueno.”