Mensaje Mensual de Nuestra Madre Amantísima para todos sus Hijos
Mayo 13, 2010

                “Mis pequeños, vuestra Madre Amantísima os dice en este día que las pequeñas criaturas reciben todos los problemas que traen todos Sus hijos a los lugares de apariciones Marianas en todo el mundo.  Los visionarios, los que hablan a través del Espíritu Santo Divino del Padre, les da el don de recibir todos los dolores, todos los problemas que vosotros traéis.  La pequeña recibe todos esos dolores después se le quitan, pero ella lo sufre como vosotros y como vuestra Madre cuando vio a Jesús cargando la Cruz de todos los pecados de cada unas de las criaturas que habitan en este pequeño universo, que es el mundo que Dios creo para cada uno de vosotros. 

                "Imaginaos cada uno cargando la Cruz que Mi Amado cargó por cada uno de vosotros.  Imaginad en vuestras mentes cargando cada uno una cruz visible, pesada arrastrando los pies, cayéndose y levantándose pero Él fue el regalo que vuestra Madre Amantísima os dio a cada uno de vosotros.  Al Amado para que con la Cruz a cuestas cargará con todos vuestros errores con cada uno de vuestros pecados, con cada una de las caídas que vosotros os dais.  Jesús os ayuda a levantaros.  Imaginaos cada uno de vosotros con la Cruz de Jesús a cuestas.  ¿Cuantos cargan una cruz de abandono, de sufrimiento, de soledad?  ¿Cuantos cargan una cruz de pecados, de errores que cometen cada uno a cada hora, a cada instante, no solo con vuestras intenciones, sino en vuestras imaginaciones, en vuestros actos?  Esa es la Cruz que Jesús carga, la Cruz que carga todavía porque el hombre no acaba de volver los ojos verdaderamente a aquel que todo lo sacrificó por cada uno de vosotros.  Es por eso que vuestra Madre aparece en todas partes del mundo y seguirá apareciendo hasta que Sus hijos recobren el Camino que el Bien Amado os dejó. 

                “Vosotros probablemente decís en vuestro interior, ¿porque Jesús va a tomar el cuerpo de una persona para traer Mensajes a través de la Virgen, de vuestra Madre?  Que lo dió todo; sufrió igual que Jesús en la Cruz, cargándola, crucificado, y Ella arrastrándose con Él en todo momento. 

                “Jesús necesita apóstoles en la tierra.  Jesús necesita doctores espirituales que caminen con Él, cargando la cruz de cada uno de vosotros para probar a cada uno su fe, su verdadera fe.  Jesús necesita misioneros que lleven la Palabra a través del Espíritu Divino que vayan a los hospitales, que oren por las personas que no tienen quien ore por ellos, por los incapacitados y los pobres de la tierra.  Jesús necesita misioneros, apóstoles, no fanáticos religiosos, que están en todas partes donde quiera que haya una aparición.  Ahí está una persona fanatizada que va a todas la apariciones del mundo entero y que va a todos los lugares, a todas las iglesias y vuestra Madre os preguntará como dice Jesús, ¿donde vosotros estaréis cuando Jesús os llame?  ¿Dónde vais a estar si estáis en todos lados?  Vuestra Madre Amantísima es una igual que Jesús, que es Uno, pero se multiplica y se os puede aparecer en cualquier forma para probar vuestra fe, vuestra bondad y vuestra caridad.

                “Jesús conoce los corazones de  Sus hijos, lee en ellos como un libro abierto.  Lee las intenciones que cada uno de vosotros lleváis, no solo a los lugares de apariciones Marianas, sino a los santuarios, a los templos, a todas partes, y conoce vuestras intenciones.  Vuestra Madre os dice que en la advocación que cada uno recibe una sanación es a esa advocación que vosotros debéis venerar es la advocación que vuestra Madre Amantísima.  Os da la bendición y os da la sanación a través del Espíritu Divino que se mueve entre vosotros con el viento con las hojas.  Recordad siempre esto que vuestra Madre os dice en la advocación que vosotros recibís el milagro a esa advocación vosotros tenéis que venerar.  Vuestra Madre es una sola.

                “Este tiempo en que vosotros estáis en este pequeño lugar, pero grande en milagros, vienen llenos de esperanza y amor hacia vuestra Madre Amantísima en Fátima [Mayo 13], porque Dios da apariciones Marianas en todas partes para que las personas no tengan que ir de un lugar a otro a buscarla.  Pone en cada lugar a vuestra Madre en una diferente advocación para que vosotros oréis y pidáis en esa advocación que vuestra Madre os aparece para que vosotros recibáis la bendición y sanación que buscáis. 

                “Buscad a Jesús en vuestros corazones que ahí está tocando a vuestras puertas.  Como el Buen Pastor buscando a Su rebaño.  Abran el corazón a Jesús.  Pedís y recibiréis, buscad y encontrareis, dice vuestro Padre.  Vuestra Madre es una sola.  Ahí está el error que vosotros cometéis buscándola aquí y allá a donde quiera si vosotros la tenéis cerca o si vosotros vivís en diferentes partes.  Llegad con amor, con fe. 

                “La fe es lo que hace que el ser humano reciba lo que va a buscar.  Mis pequeñas criaturas, si vosotros no tenéis fe, no recibiréis ni aquí en este pequeño lugar, ni en ningún otro lado donde vayáis.  Esa es la tibieza de la que Jesús habla.  ‘El celo Me consume,’ dice Jesús, porque el celo de Jesús es cuando Él ve que vais caminando a ciegas sin rumbo buscándolo en diferentes partes igual que a vuestra Madre.  La Virgen que se aparece en este lugar es La que aparece en todas partes.  A los grandes profetas de la antigüedad, Dios los ponía separados en diferentes lugares, no estaban juntos.

                “Disfrutad cada uno de vosotros del amor de Jesús a través de María donde quiera que Ella esté.  Él os las pone cerca porque cuando vengan los días de tribulación, tendréis que buscar el lugar más cercano.  María os viene anunciando desde hace tiempo que grandes acontecimientos ocurrirán en el mundo y ya han ocurrido muchos de estos acontecimientos que vuestra Madre os ha dicho en todas partes para prepararlos.  Hoy os digo de nuevo que Mi pequeña recibió la revelación que vuestro Padre le dio.  Recordad lo que está pasado en el océano, en ese mar gigante que Dios hizo para que cada uno de vosotros os regocijéis.  Lo que está pasando y pasó no fue un acto por casualidad, fue un acto de terrorismo, pero que el hombre no lo dice porque no puede porque se acabarían las ganancias que el hombre busca.  Vuestra Madre os dijo que llegaría el momento que no habría ni peces en el mar que comer, ahí donde ahora tenéis.  La contaminación de todos esos alimentos que vosotros ingerís fue un atentado terrorista, pequeños Míos, y muchos más habrán en todas partes por que el anticristo quiere gobernar al mundo entero y está agazapado esperando el momento para causar muchas muertes.

                “Debéis de estar preparados en oración en vuestros hogares y en todas las iglesias que os dejo Mi Amado Jesús.  Ahí ante el Santísimo Sacramento arrodillados y pedid que Él os escuchará.  Ahí está Presente, arrodillaos ante Él.  Tenéis que tener capillas, pequeñas, en vuestros hogares, porque llegará el momento en que no podréis ir a esas iglesias, que son de todos vosotros cuando sois bautizados.  Tendréis que orar.  No habrán pastores para conducir el rebaño porque el hombre mismo quiere terminar con esos pastores y esos sagrados lugares para adorar al Bien Amado. 

                “Recordad que la tibieza no es que no creáis sino es que creéis en todo y no creéis en nada.  La fe no se fabrica; la fe nace en vuestros corazones.  Buscad a Jesús ya la Virgen Maria en vuestros corazones.  Aceptad las apariciones como una bendición Divina que os da Dios para que vuestra Madre Amantísima vuelva a traer el rebaño al redil y al Camino del Amor del Bien Amado. 

                “Orad por los pastores que os dejo para conducir el rebaño, están siendo atacados vilmente por la malignidad y por el anticristo que quiere gobernar al mundo y quiere acabar con esos pastores que Él os dejo para guiar a Su rebaño.

                “Orad, orad, pequeños Míos.  La oración cambia cualquier Mensaje que vuestro Padre os mande a través de vuestra Madre y del Espíritu Santo.  Regocijaos mientras vuestra Madre os aparezca en muchas partes pero podéis ir a las [apariciones] que tengáis cerca.  Orad por la familia, que está destruida.  Muchos enfermos que han venido hoy aquí van a recibir sanaciones a través del Espíritu Santo, que se mueve en este lugar. 

                “Vuestra Madre os dará la bendición como siempre sin que os mováis del asiento y después quien quiera hacer alguna pregunta vuestra Madre a través de la pequeña os contestará.

                “Os amo, pequeños Míos.  Entregad lo que cada uno traiga en vuestros corazones y no hagáis como otros que vienen y dicen, ¿Porque la Madre no habla en ingles si muchos que vienen aquí hablan ingles?  Jesús prueba la fe de cada uno de vosotros, y cada uno recibiréis en este lugar según vuestras intenciones.  Podéis dar testimonio de que vuestra Madre si está aquí, aunque muchos no lo creáis en la pequeña criatura, que no sabe nada de nada.

                “Recordad siempre que Dios, vuestro Padre Celestial, no dará prueba a nadie que venga a buscarla.  Se engrándese en los más pequeños, en los que no saben nada.  A los sabios los humilla y a los pequeños los eleva.     

                “Os amo.  Os bendigo en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.  Amen.”

               

Mayo 1,  2010
Noche de Vigilia

                Mi pequeña, para Maria en el día del advenimiento de mi pequeño Jesús, vosotros celebráis ese día maravilloso en que vosotros consagráis a Vuestra Madre a todas las madres que están en ese pequeño mundo en que vosotros vivís; regocijaos a través del amor que Vuestra Madre Amantísima ha sembrado en vuestros corazones, sea  un día para vosotros grande.

                Para vuestra Madre todos los días en ese mundo en vosotros estáis es el día de las madres, no es un solo día pequeños míos, como la pequeña os dijo, todos los días son para amar y bendecir a las madres que traen con regocijo a la vida a una pequeña criatura que no pidió venir al mundo pero que vosotros la concebís a través del amor, a través del matrimonio donde todo se confabula para poder procrear a una criatura, traerla al mundo para que viva y se regocije en ese hogar que vosotros formáis para ayudar a todos aquellos.  Pero hoy, mi pequeña criatura con dolor Vuestra Madre os dice.  Todo se confabula y hoy vosotros pensáis, muy pocas madres se pueden llamar madres, por aquellas que dicen un Si al alumbramiento. 

                Hay tiempo para tener en el vientre a vuestras criaturas  para que en el momento de nacer llene el hogar de un amor infinito, nunca antes visto, porque hoy el hombre, ya hace los inventos para formar criaturas, con diferentes formas porque se quieren hacer Dioses, y muchas madres que conciben sin amor a una criaturita, también la asesinan en el vientre, donde más seguras tienen que estar esas criaturas, cuan doloroso. 

                Si cada uno de vosotros vierais en el momento que un hombre está para traer al mundo una criatura y dejarla vivir, interrumpe ese mandato divino, si pudierais ver como le cortan los miembros a las criaturas no nacidas, crímenes monstruosos, que después que el Padre os da la bendición de tener una criatura, de concebirla en vuestro vientre, es la primera cuna que ellos tienen en el mundo, las asesinan y no las dejan nacer.  Por eso es que vuestra Madre os dice, no creo que vosotros con verdadero amor celebréis un día especial.  Todos los días son de vuestra Madre y todos los días son los de las madres del mundo, aquellas que verdaderamente se atreven a decir un si a un nacimiento y un no a un crimen, a un asesinato vil, malvado inhumano ante los ojos del padre Celestial.

                Cuanto sufre vuestra Madre Amantísima cuando ve las manos de aquellos que deben de salvar una vida, cuanto sufre Vuestra Madre cuando ve cortarle los miembros y sacarlos a pedazos  del vientre de la madre.  No podéis imaginar como a otros, que los dejan nacer, los maltratan, los aniquilan, muchos huyen de sus hogares buscando un lugar donde no reciban los maltratos de los propios padres.  Hijos míos ved cuan doloroso es para el Padre Celestial haber creado un mundo donde vosotros tenéis que regocijaros para vivir felices, sin embargo convierten en un infierno, en un holocausto, las bendiciones que Vuestro Padre Celestial os da.

                Gravad en vuestros corazones las palabras que Vuestra Madre os dice en este día, a veces muchas mujeres como vosotras, quieren tener hijos y no les da Dios esa bendición y muchos dirán porque otros los matan y el que los quieren tener no los conciben, porque no todos están preparados para una responsabilidad tan grande como es traer un hijo al mundo.  Para amarlos cuidarlos, ni siquiera eso pequeños míos,  Vuestra Madre os dice que no pudo amamantar a su hijo porque no concibió como vosotras.  El pequeño Jesús se alimentaba con leche dormida, leche y miel hasta sus doce anos vuestra madre lo tenía, era virgen, pero Vuestra Madre le dio de beber a la criatura, la leche dormida para protegerlo de todos los males que vendrían para Él en su pequeña edad, por eso pequeños míos hoy Vuestra Madre como vosotros os regocijáis esperando muchos para rendir homenaje a vuestra madrecita que tenéis a vuestro lado o una oración a aquellas que ya han partido, pero vuestra Madre tiene siglos, siglos mirando las aberraciones de la pequeñas criaturas aquellas que traen al mundo un hijo no deseado, aquellas que se promiscúen antes de un matrimonio bendecido por la iglesia que sois todos vosotros, sois iglesia recordad esto, pero no sabéis honrarla como es debido, muchos se promiscúen, conciben hijos no deseados para después sacarlos a pedazos de sus vientres maternos por no desearlos.

                Sabéis vosotros cuantas criaturas recoge mi bien amado en sus manos, votados por vosotros y los convierte en Ángeles, pequeños Ángeles que llenan el universo y que vosotros no veis y Vuestra Madre quisiera ponerlos a vuestro lado para que vean aquellas criaturitas recogidas por Jesús, por vuestra Madre convertidos en angelitos, unos que no tienen miembros solamente cuerpitos alados, volando donde vosotros no los veis.

                Muchos a pesar que celebráis un día tan maravilloso para vuestra Madre Amantísima que está en cielo y dijo un si porque no conocía hombre, pero dejó llegar al mundo a aquella criatura que traía en sus ojos la luz para iluminar a todos vosotros, y llenar vuestros corazones de la luz que nunca habían visto antes de que Él naciera porque abrazaban cultos religiosos ofreciendo dádivas a un Dios que ellos mismos fabricaban y que todavía hoy fabrican en los corazones de muchos seres humanos.

                Renegáis de la eucaristía, no la tomáis como es debido tomarla en vuestra boca, honrando aquel cuerpo en ese pedacito de pan que les dio Jesús a sus Apóstoles para enseñaros como debéis tomarla, honrándola, venerándola, en el Santísimo Sacramento del altar, donde nadie hoy honra ese pedacito de cuerpo en que se convirtió el Bien Amado Jesús de Vuestra Madre, de esa Madre que hoy veneran en todo el mundo, hasta en los santuarios de los templos, pero que al Rey de reyes no le rinden el honor ya que muchos la toman en las manos.  Otros la botan cuando salen del santuario, sin que el propio pastor que os dejé para dárosla a consumir honrándolo allí, para servir de perdón a aquel que con verdadera humildad se arrodille y humillado ante Él tome la sagrada Eucaristía que es el cuerpo de ese pequeño que os di como un ágape de amor para que todos vosotros pudierais un día recibir el perdón de Él en el Santísimo Sacramento del Altar donde se sacrifica todos los días a Jesús para perdonaros todos vuestros pecados.

                Orad pequeños míos, y honrad con oraciones verdaderas salidas de vuestros corazones a ese Jesús que murió en la Cruz por todos vosotros y que hoy, muchos no lo honran y Vuestra Madre que lo pudo salvar no lo hizo, para obedecer a Dios Padre quien se había engendrado en ella misma para convertir la carne en Verbo y el Verbo en amor hacia cada uno de vosotros.  Os amo pequeños míos, os amo.  Os bendeciré.

 

Junio 1, 2010
Guayaquil, Ecuador

                Mientras Rosa se encontraba en misión en Guayaquil, Nuestra Madre se manifestó en alocución:

                “Pequeña, como siempre os he dicho que mi Amado Jesús te escogió desde el vientre de Vuestra Madre, y ahí te conoció.  “El sabía como es tu carácter y así te formó. 

                No ofendes a nadie, lo importante es lo que tú haces con mis pequeñas criaturas, las desposeídas. ( Rosa sollozaba).  No sufras, podrás hacer más de lo que piensas y lo que te aqueja no es duradero, es pasajero, tenías que pasar por eso, la persona que te lo causó, y las consecuencias de su acto criminal, ora por ella.

                Este país no está compuesto por una sola persona, son muchos y el corazón de Vuestra Madre  sufre por este pequeño país, mi pequeña, pero sé que a través de vuestras oraciones, se levantará de las cenizas como el ave.  Recordadlo siempre, no temas reír ni cantar, así cantan los Ángeles y los santos en el cielo.

                Este país, Vuestra Madre os asegura, se podrá sacudir de las cadenas que lo atan y lo quieren ahogar en la miseria, en el desamparo y en el dolor, por eso a través de tu persona pequeña mía, Vuestra Madre Amantísima, no solo hará otros milagros que has visto, sino muchos más.  Sufres porque a pesar de que Vuestra Madre está contigo, reniegas del mal que tienes, pero todo pasa, solo Dios queda pequeña mía.  A las pequeñas criaturas que caminan contigo, verán sobre sus familias las bendiciones que Vuestro Padre Celestial os dará, si cumplen con amor verdadero lo que ha sido escogido para ellos y para ti.  Fuiste escogida por las oraciones de Narcisa, que fueron escuchadas.  Esa pequeña giganta hija de este país al que Vuestra Madre también eligió, se parecía mucho a ti, alegre, cantarina, traviesa y querendona de los animales, por eso te hemos traído aquí, piensas que no vas a regresar, pero estas equivocada, si alguno de los que te acompañan renuncia, otros vendrán, pero Vuestra Madre espera que continúen en este camino de amor que habéis escogido.

                Muchas cosas ocurrirán en este país, pero será salvo porque está consagrado al Corazón del Bien Amado y de Vuestra Madre Amantísima.  No temáis por tu hogar, tus seres queridos han sido acompañados por Vuestra Madre  y el Espíritu Divino de Dios que está allí. Volverás, te abriremos los caminos para que continúes trayendo la paz y el amor a este lugar y a las pequeñas criaturas que te reciben.  Veréis el triunfo del Inmaculado de Maria y el de Vuestro Padre Celestial en este pequeño país.  Os bendigo pequeños míos.  Soy vuestro Padre Celestial, vuestra Divina Misericordia.