Mensaje Mensual de Nuestra Madre Amantísima para todos sus Hijos
Abril 13, 2010

“María y Jesús no hablan de política, pero si hablan sobre los gobiernos, porque el gobierno es compuesto por hombres.  Dios envía a todos los países Su Justicia porque todos quieren caminar de la mano del maligno.  Las naciones no quieren creer en Jesús o María.  Todos los gobiernos son anti-cristianos y toda la gente lo acepta y nadie se rebela, supuestamente para mantener la paz.  Pero la paz no viene al mundo si el hombre no busca esta paz.  María y Jesús no promueven guerras.  Las malas acciones del hombre traen consecuencias en el mundo.  Las consecuencias crueles que están ocurriendo en todas partes del mundo son porque viven de esa manera cruel. 

“Dios hace Justicia.  Sacó a Su pueblo de Egipto y los enemigos que lo seguían se ahogaron en el mar.  Cuando Coré desobedeció en el desierto a Moisés, cuando Moisés estuvo por cuarenta días en la montaña con Dios, hicieron el becerro de oro y lo adoraron como si fuera Dios, ¿Qué hizo el Padre Celestial con Coré?  Le dijo a Moisés, ‘Baja de la montaña.  Lleva a Coré y a su tribu y páralos delante de la tienda.’  Moisés pidió que no castigara al hombre y lo perdonara.  Dios dejó caer un rayo del cielo y consumió a todos los que estaban ahí menos a Coré.  Lo dejó para que viviera, deambulando en el desierto sin tener donde recostar su cabeza.  Entonces, Dios si manda la Justicia sobre el hombre, aunque el hombre no lo quiera reconocer. 

“Hoy, Dios manda a Sus siervos a hablar en el Nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo como la pequeña hoy esta hablando.  Ella no es la que habla, sino es el Espíritu Divino que le sopla al oído para que le diga al hombre, ‘Andad por el Camino que Jesús, el que murió en la Cruz, os dejó.  No lo tuerzan, porque quiero que cuando Yo regrese al mundo otra vez, recoger a todos Mis hijos y hacer una nueva Jerusalén. 

“Hoy, pregunto a todas las personas que se encuentran aquí, ‘¿Creéis que Jesús viene por segunda vez?  Entonces, coged a vuestros hijos, vuestras familias para la nueva Jerusalén.’  Si vosotros aceptáis todo lo que Jesús os dice en todos los Mensajes en todas partes del mundo, caminareis otra vez con Jesús.  Jesús no vendrá otra vez a la tierra a ser crucificado, sino para reinar como Único Rey.  Por eso os digo, ‘No dejéis la Iglesia, no abandonéis a los sacerdotes porque todos los seres humanos sois pecadores desde el vientre de vuestras madres.’  Todos cometéis errores, es humano.  Como dice Jesús, ‘El que esté libre de pecado, que tire la primera piedra.’  Todos sois pecadores.

“Todo lo que está escrito que pasaría para este tiempo, se cumplirá.  Habrá un gran atentado en los Estados Unidos, porque quien está gobernando es como un niño, jugando con un juguete nuevo que nunca pensó tener en sus manos.  Está jugando con la vida de toda la humanidad. 

“Orad, vosotros, todo el tiempo.  Terroristas vendrán a los Estados Unidos y matarán muchas personas.  Matarán no solo en los Estados Unidos, sino en muchos partes del mundo.  Los gobiernos de los países de América Latina son muy peligrosos.  Están matando a sus pueblos de hambre y los están llevando a la miseria como el pequeño país que es gobernado por el anticristo desde hace mucho tiempo y ha envenenado los corazones de todos los demás países que hay en toda América.  La Virgen no habla de política, habla de gobiernos.

“Todos los pueblos de América con sus gobernantes asesinos y criminales se caerán cuando los pueblos bajen sus brazos y cierren todos sus comercios, se declaren en  huelga para que pueda verdaderamente ser libre cada país. Ya que no quieren luchar de otra manera tienen que luchar con los brazos caídos para que pueda triunfar la verdad y los grandes tiranos que matan de hambre a las criaturas caigan definitivamente y no tengan deseos de volver a estar en el poder.

“Hay un voluntario que camina con la pequeña en este lugar hace muchos años, él y su esposa estaban hablando sobre los alimentos y vuestra Madre en ese instante le reveló a la pequeña y le dijo, ‘Hablaré este día de esos grandes comercios que botan los alimentos a la basura y no son capaces de mandarlos a los asilos de ancianos, a los lugares sustitutos de niños abandonados en los países de Centro y Sur América. Muchos se mueren de hambre y no tienen que comer, mientras que en esos grandes restaurantes el hombre desobedeciendo al Padre bota los alimentos que pueden ser comida para esas criaturas que se acuestan sin nada que tomar o comer por eso Jesús esta castigando al hombre.  Cada vez que botan un alimento a la basura y no se lo dan a un necesitado tiembla la Cruz con Jesús en Ella.  Cada vez que toman la Comunión en la mano, sangra Jesús en la Cruz en todas partes del mundo y sangra María.  Recordadlo, Mis pequeños, recordadlo.

“Orad por todos los enfermos que hay en todas partes del mundo.  Orad por los que han muerto que ya están rindiendo a Dios declaración ante el Juez.  Orad por aquellos que se acuestan sin probar alimento.  Orad, porque caigan los países anti-cristianos y porque el Papa no sea condenado.  Orad por él.  Orad por toda la Iglesia que son todos vosotros que camináis con Jesús y María.  Orad, la oración puede cambiar cualquier profecía.  Orad porque la Virgen María, vuestra madre siga apareciendo en todas partes para traer al rebaño de nuevo a Jesús.  Las ovejas andan perdidas, pero muchas veces Jesús hace que vuestra Madre Amantísima se aparezca a esas ovejas y las traiga de nuevo al redil. 

“En el Nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo.  Amen.”

 

Abril 9,  2010
Noche de Vigilia

                Mis pequeños, mis pequeñas criaturas, cuanto regocijo de vuestra Madre en este día siente en su corazón, cuando ve al rebaño del Bien Amado, reunido en este pequeño lugar, escuchando las voces de vuestros corazones que humillados, muchos pensando, queriendo adivinar, queriendo ver mas allá de lo que vuestro Padre Celestial os quiere dar.  Vuestra Madre no es la pequeña criatura, vuestra Madre está en ella, en sus pies en sus ojos, cuando os mira para leer en cada actitud para leer si vuestra Madre verdaderamente se encuentra entre vosotros, en espíritu y verdad.

 Vuestra madre está en cada uno de vuestros corazones en este momento recibiendo el calorcito, la embriaguez del perfume de Maria que puede irradiar en cualquier momento entre cada uno de vosotros, si abrís vuestros corazones con verdadero amor sin ninguna curiosidad solamente con el amor que os trae a este pequeño lugar bendecido por Dios que es el único que lo puede hacer.  Vuestra Madre ve cada una de las ansiedades que vuestros corazones traen.  Os digo he venido en este misterio de amor donde Vuestra Madre con amor os trajo al mundo al pequeño, la luz que iluminaría el mundo entero, porque el hombre vivía en tinieblas adorando dioses en artefactos que fabricaban para adorar a un Dios que no conocían.

 Vuestra Madre Amantísima trajo al verdadero Dios, al único que iluminaría al mundo y al hombre, quien después lo entregaría en una madrugada oscura por un traidor de su propio rebaño, como los hay en todas partes, lobos disfrazados de ovejas que caminan con el redil de Jesús sembrando dolor y muerte en todas partes del mundo. 

                Vuestra Madre os trajo un ser que había engendrado Dios en su cuerpo virginal a través del Espíritu Divino, y en su vientre se convirtió en carne para servir después de Eucaristía cuando muriera en la Cruz y resucitara, recordad como Jesús en la cena se ofreció a todos sus Apóstoles. ‘Tomad y  comed de Él les dijo Jesús, porque este es mi cuerpo que será entregado por todos vosotros’.  Así fue, vosotros conmemoráis cada tiempo ese momento en que Jesús fue sacrificado como un cordero en la Cruz después de guiar a su rebaño al redil y dejaros la promesa de su resurrección y del amor a todos vosotros.

 Jesús pequeños míos se entregó por cada  uno con amor a la humanidad; pero sigue dispersa, cada cual por su propio camino, no inventan nada que pueda liberar al hombre de la condena de la muerte por grandes enfermedades.  Pero si fabrican armas de destrucción masiva, guerras para matarse unos a otros, pero no acaban con el cáncer y las grandes enfermedades que destruyen a la humanidad.

 Por el poder y la maldad los pueblos se mueren de hambre mientras que sus gobernantes viven como los grandes reyes de la antigüedad, acaparando denarios en sus arcas, pisoteando, asesinando, regocijándose en cada muerte de cada ser humano.  Por eso pequeños vosotros sufrís hoy las consecuencias de la maldad del hombre que no acaba de entender que Dios es un Dios de amor para todos los hombres del mundo.  Un Dios de perdón para aquellos que se arrepienten y con verdadera justicia guían a su pueblo a un mar de verdadera felicidad porque Dios hecho hombre en Jesús les dejó las armas del amor en la naturaleza, medicinas que vosotros podéis utilizar que están en esas selvas, en todos vuestros países, buscad y encontrareis, no os confiéis del hombre que estudia y se llena de ambición, pues ahora no lo hacen para salvar cuerpos, sino para llenar sus arcas.  

                En este tiempo, el hombre recuerda el sacrificio del Bien Amado y del dolor de Maria, pero después os olvidáis de todo y volvéis al mismo camino torcido. Pequeños míos Dios os dice: “El Buen Pastor conoce a sus ovejas, las traerá de todas partes.”

 Atended a las señales que Dios os da, recordad que Dios no os avisa cuando va dejar caer su mano poderosa y su justicia sobre el hombre.  Preparaos, preparad alimentos, y medicinas naturales que vosotros podéis ingerir para curar vuestros organismos.  Preparaos en oración, en recogimiento, orad a tiempo y a destiempo, pequeños, se acercan momentos difíciles para la humanidad y vosotros lo veréis.  Muchos de los que estáis en este pequeño lugar  veréis las consecuencias de la maldad y del odio del hombre en la humanidad, no creáis que vuestra Madre os miente, muchos de los que estáis aquí, veréis los acontecimientos que se acercan.

 Serán grandes momentos de prueba para cada uno de vosotros; pero aquel rebaño a quien Jesús toque los corazones, estarán preparados en oración y en cambiar vuestros destinos.

 Hay cosas inmensas que hace la humanidad hoy en día con los pensamientos, con la mirada con los actos en contra de la humanidad, de los niños, de los jóvenes.  Nadie ora por los jóvenes que están haciendo medicina diabólica para hundir a otros jóvenes en las drogas, se convierten después en asesinos matando criaturas inocentes, a sus propios compañeros, en las escuelas.

                Orad por la iglesia necesaria, porque es Jesús mismo quien hizo su iglesia para todos con un solo Dios, para toda generación, no hay dos dioses, hay un solo Dios con los sacerdotes que diariamente consagran el cuerpo en el altar del sacrificio, hoy el hombre no cree en ese pequeño sacrificio de amor,  ya no va a los templos a comulgar y si van es a tomarlo indebidamente porque no creéis en Él, pero si lo tomáis indebidamente lo tomareis para vuestra propia condenación.

                Vuestro Padre os dice todo el tiempo, recordad que el cuerpo de Jesús no lo podéis recibir en vuestras manos, llenas de los vicios del mundo, la sangre de Jesús se derrama en cada Cruz, en alguna parte del mundo, cuando vosotros tomáis la comunión en vuestras manos que vienen sucias del mundo.  Vuestro Padre os lo dice continuamente a cada uno de vosotros, a través de todas las apariciones de Vuestra Madre, es todas partes, y seguirá apareciéndose proclamando la pureza de la consagración y el ingerir aquel cuerpo sagrado que dejó el Bien Amado para cada uno de vosotros.  Vuestro Padre os dice: “Todo lo que vosotros sacrifiquéis en un acto de amor, adorando verdaderamente a Jesús, honrando a Vuestra Madre Amantísima que se aparece en todas partes del mundo, para traer a sus hijos al verdadero camino que es Él, el Dios de Israel, el Dios de todos los hombres, Jesucristo crucificado por cada uno de vosotros.

 Regocijaos cuando podáis tomar ese cuerpo espiritual en vuestros labios.  Vuestra madre seguirá apareciendo en todas partes para salvar a todo el rebaño disperso de Jesús.  Orad, orad por la pequeña porque la maldad del hombre la tocó, pero camina con las sandalias del Bien Amado, cayéndose y levantándose. Al igual que aquel que lo traicionó, así también sufrirá la persona que le hizo el daño tan inmenso, ella sufre pero la persona que se lo hizo recibirá la justicia divina.  Dios hijos míos, no castiga, pero hace justicia cuando deja caer su mano poderosa sobre el que obra mal.  Amen, Amen.  Os amo y os bendigo.        

 

Abril 28, 2010

                “Hijita querida, yo Vuestro Padre Celestial os digo: “Soy yo vuestro Padre, quien escogió a Vuestra Madre Amantísima para que recibiera los mensajes que a través del tiempo os he mandado con Vuestra Madre.  Ella cuando le envié al “Ángel para decirle. “Alégrate llena de gracia el Señor te ha escogido para que tuvieras un hijo al que le pondrías por nombre ‘Emmanuel que quiere decir ‘Dios está contigo.’  Maria a pesar de no conocer hombre como le dijo el Ángel, creyó y dijo Sí.

 Desde ese momento caminó en andas, porque los Ángeles la rodeaban donde quiera que tuviera que ir, porque Dios se había engendrado en ella para llevar al  hombre la fe y la luz, porque el hombre vivía en tinieblas adorando otros dioses y becerros de oro o de bronce a quien adoraban ofreciéndole doncellas  vírgenes, jóvenes, que morían con una creencia anticuada, sin temor, porque no conocían una verdadera fe basada en el amor, en la fe y la caridad hacia los demás.

Fue por eso que Dios, en un gesto de humanismo quiso engendrarse como hijo en un vientre virginal para hacerse hombre, vivir con él, y ser sacrificado como un cordero.  Conocer el dolor, la humillación, la muerte, para luego resucitar y darse a conocer  como el Espíritu Divino de Dios, para juzgar al  hombre y darle lo que cada uno haya sembrado; si sembraste rosas, eso recibirás, si sembraste odio, envidia, si obraste mal, eso recibirás porque Dios Padre le dio la misión de sembrar amor mientras caminaba entre vosotros en el mundo.  Vuestra Madre Amantísima sufrió el mismo calvario de su hijo, su dolor, su sacrificio.  Es por eso que Ella en sus apariciones lleva al hombre que cree a la salvación.  Esa es la misión.  Amen  Soy Vuestro Padre Celestial vuestra divina misericordia.  Amen