Mensaje Mensual de Nuestra Madre Amantísima para todos sus hijos
Mayo 13, 2009

“Mis pequeños, Mis pequeños, en este día donde Vuestra Madre Amantísima os ha querido tocar, Ella con el Espíritu Divino del Bien Amado, pudo tocar aquellas criaturas que se multiplicaron para recibir el toque maravilloso de la fe y del Amor de Vuestra Madre Amantísima.  Hace rato que Vuestra Madre está con vosotros, registrando los corazones de cada una de la criaturas que hoy están en este lugar.

 Muchos han recibido esa bendición Divina que es el ser tocados por Vuestra Madre Amantísima  porque usualmente es el Bien Amado, es Él quien os toca, o el Padre Pío que siempre está con la pequeña [Rosa], pero hoy Vuestra Madre, no quiso, se interpuso en el medio y os dijo: Dejadme a Mi hoy la gloria de poder servir a cada uno de mis pequeños, porque si vosotros hacéis memoria como la pequeña  os dijo, es el tiempo de la Sagrada Familia donde todos los hogares, hoy principalmente, tenéis que orar un rosario dedicado a Vuestra Madre y a todas las familias del mundo.  En ese tiempo cuando Vuestra Madre Amantísima recibió la Luz y en un Ágape de Amor la ofreció al Señor, Padre de todos los padres, como regalo para que vosotros con una fe que verdaderamente salga de vuestros corazones recibierais ese regalo de amor que Vuestra Madre un día ofreció al Padre Celestial  en el cuerpo de Jesús.  Ella regaló al Bien Amado a toda la humanidad para que a través de la Sagrada Eucaristía y del Espíritu Divino  podáis regocijaros en el gran amor que Dios os dio con la complicidad de Vuestra Madre Amantísima cuando le dijo al Ángel SI.  Ella sí aceptaba lo que el Padre Celestial ofrecía, concebir a través del Espíritu Divino a Jesús, en Carne Viva, en Su Cuerpo Virginal al Bien Amado para que después cuando hiciera el gran sacrificio de dar Su vida por cada uno de vosotros, ofreceros la resurrección para que todo aquel que camine en Su Luz y pida perdón, podáis recibir verdaderamente al Bien Amado en vuestros corazones.

Pequeños, hoy Vuestra Madre os está dedicando más tiempo a cada uno de vosotros.  La pequeña recibió las verdaderas enseñanzas que están escritas en las Sagradas Escrituras y os habló explicando las cosas que Vuestra Madre en persona no os puede revelar, si no es a través de una criatura escogida por Dios para llevaros el pensamiento, la verdad de todo lo que aconteció hace siglos y que hoy el hombre, arrastrados muchos por la maldad, algunos por vanidad, otros por soberbia niegan la verdad de lo que esta escrito en las Sagradas Escrituras, que fueron hechas por verdaderos sabios, verdaderos teólogos, recogiendo todo lo que Vuestro Padre Celestial os reveló a través de Su Hijo Amado, el Bien Amado Jesús de Nazaret, el Gran Maestro, el Cordero de Dios que vino al mundo a quitar los pecados de aquel que verdaderamente se arrepiente.  Muy pocos, pequeños Míos, se arrepienten a tiempo para seguir la caridad de Vuestro Padre Celestial.  Recordad que solo hay un solo Padre Celestial – el Padre, Hijo y Espíritu Santo es uno solo, la Divina Trinidad.

 Orad cada uno de vosotros por vuestros hijos que se pierden en la droga y el alcohol.  Orad por la familia para que se mantenga unida, porque el hombre y la humanidad se reconcilien con Dios antes de que las trompetas del Bien Amado suenen a través de Sus Ángeles en el mundo, porque el hombre conocerá la verdad de la Justicia Divina, que existe aunque el hombre no crea.

 Orad por la pequeña que emprenderá su viaje de costumbre al pequeño país donde hace obras de caridad con amor, con ese amor que os da a cada uno de vosotros, ella reparte con verdadero amor lo que recibe de cada uno de vosotros en este pequeño lugar, pero grande en milagros, en conversiones, en amor.  Orad porque allá le esperan los otros hijos que el Bien Amado le entregó cuando le enseñó este camino de amor que para el hombre no es fácil, como no fue fácil para Vuestra Madre decir que Si al Espíritu Divino y engendrar en Su Vientre al Bien Amado sin conocer hombre.

 Orad por los santuarios en todas partes del mundo, por todos los visionarios de este tiempo, que son como los profetas de la antigüedad.  Orad por la paz entre los hombres, porque se acercan tiempos difíciles, pequeños Míos, que vosotros ni siquiera os imagináis.  Así como las columnas de los santuarios se están derrumbando, así como cada vez de una de esas columnas cae y se revuelca en el lodo, en la suciedad del mundo, Vuestra Madre llora, sufre por un hijo que se pierde y Mi Amado Jesús sufre, por un cordero que abandonó el rebaño y decidió unirse a otros que Él ni siquiera conoce.  Que el cordero ni siquiera conoce el verdadero significado de lo que es abandonar al Buen Pastor, al Bien Amado que os conduce a la verdadera Luz y al Verdadero Camino.  Pero ellos [pastores] cuando se desvían, cuando se pierden y el Buen Pastor los llama y no escuchan Su Voz, recibirán cada uno de los que dejan que la cimientes de esa columna se tambalee y no busque ayuda para volverla a construir, ante los Ojos de Dios seréis culpables; a lo mejor vosotros no entendéis lo que Vuestra Madre os ha querido decir.  Recordad que cada uno de vosotros formáis parte de esas columnas, porque habéis sido llamados al verdadero camino, conocéis la Verdad y conocéis la Luz.  No os apartéis de esa Luz, porque cuando llegue el momento de la oscuridad, no vais a tener tiempo de encender las velas para alumbrar el camino. 

Os bendigo en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.  Pequeños Míos, ayudad al Bien Amado a cargar la Cruz, no abandonéis el Camino de la Luz que al final de él está Vuestra Madre que abrirá Sus Brazos para recibiros sin poneros condiciones, porque habéis creído.  Amen.”

 

Celibato Eclesiástico.  La práctica de abstenerse del matrimonio cuando se han recibido las sagradas órdenes, y la de no ordenar hombres casados. La excelencia y ventajas del celibato son descritas por San Pablo en 1 de Corintios 7: 1-38.  En la Iglesia de Occidente, los que han recibido el subdiaconato no pueden casarse.  Una tradición de los primeros tiempos del cristianismo prohibía al clero casarse después de la ordenación; en el siglo III era una práctica general  y el Sínodo de Elvira, celebrado en el siglo IV en España, decretó que todos los clérigos, aun aquellos ya casados, debían vivir en continencia.  Una serie de sínodos desde el principio del siglo XII (especialmente el segundo Concilio de Letrán en 1139) declararon  que el matrimonio de personas que hubieran recibido las sagradas órdenes no era solamente ilegal, sino inválido.  Durante siglos después era permitido a los clérigos menores servir en la Iglesia,  aun cuando vivieran en el estado de matrimonio.  Sin embargo, se estipuló que si se casaban después de recibir  las órdenes, perdían los privilegios del estado clerical.  Como el celibato del clero es una ley de la Iglesia, ésta puede dispensar de tal obligación.  Algunas veces dispensa a diáconos y a subdiáconos cuando dejan las órdenes, pero prácticamente  nunca lo hace con un sacerdote.(El sacerdote será sacerdote para toda la vida).  En casi todas las Iglesias católicas orientales hay sacerdotes casados.  Aunque la disciplina difiere en los varios grupos,  la práctica general es permitir la ordenación de hombres casados, pero no permitir que se casen los diáconos y los sacerdotes ya ordenados.  Además se consagra como obispos sólo a hombres célibes o viudos.   

¿Porque la Iglesia Católica requiere sacerdotes que sean célibes? Como otro Cristo, el sacerdote tiene que pertenecer enteramente a Dios y a nuestro Señor Jesucristo.  Ya que el sacerdote tiene que subir diariamente al altar a ofrecer el Divino Sacrificio de Amor, él tiene que ofrecer su corazón a Dios en un amor no compartido.  Una razón adicional es que el sacerdote tiene que permanecer a disposición de todas las almas, como el padre y hermano de todos, lo cual no será posible si él tiene que cuidar a su propia familia.  Un sacerdote Católico es el representante de Jesucristo que tampoco fue casado, y mientras habitó entre los mortales, vivió enteramente en el amor del Padre Celestial y como primer supremo sacerdote dio ejemplo de lo que es la pobreza, la castidad y la obediencia.

Pobreza: “Si quieres ser perfecto, anda y vende cuanto tienes, y dáselo a los pobres, y tendrás un tesoro en el cielo; ven después, y sígueme. (Mat. 19: 21) El voto de pobreza separa al religioso de todas las posesiones materiales, que presentan un obstáculo para el servicio de Dios.

Castidad: “No todos los hombres con capaces de esta resolución, sino aquellos a quienes se les ha concedido de lo alto. Porque hay unos eunucos que nacieron tales del vientre de sus madres; hay eunucos que fueron castrados por los hombres; y eunucos hay que se castraron en cierta manera así mismos por AMOR AL REINO DE LOS CIELOS CON EL VOTO DE CASTIDAD.  Aquel que puede ser capaz de eso séalo”. Mateo 19: 11-12.  El religioso que desea entregarse completamente a Dios, alegremente abandona el gozo de formar una familia.

Obediencia: “Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese así mismo, y cargue con su cruz, y sígame. Pues quien quiere salvar su vida obrando contra mi, la perderá; más quien perdiere su vida por amor de mi, la encantará. Porque de que le sirve al hombre el ganar todo el mundo, si pierde su alma, o con qué cambio podrá el hombre rescatarla una vez perdida?” (Mateo 16: 24-26) Por el voto de obediencia el religioso procura imitar a nuestro Señor Jesucristo, quien por nuestra salvación fue obediente hasta la muerte. El religioso renuncia así a su propia voluntad para ser completamente dócil a los mandatos del Espíritu Santo en su alma y a la voluntad de Dios, expresada por sus superiores. Ahí está la belleza y grandeza de la vocación religiosa. No hay duda de que Dios inclina su oído a las oraciones de tan generosas almas.

Noche de Vigilia

Mis pequeños, mis pequeñas criaturas, hoy vuestra Madre está triste pequeños, muy triste, no solo por el hijo que se aleja del Bien Amado, sino también por las cosas que están pasando en ese mundo vertiginoso donde vosotros os revolcáis en el lodo como dice el Bien Amado, sí, el fango por donde está hoy la humanidad arrastrándose y olvidándose de los sacramentos que un día recibieron ante el altar para seguir al Bien Amado.

  Podéis escrutar en las Sagradas Escrituras, podéis ver todo lo que está preparado para éste tiempo, donde el  hombre corre en una carrera vertiginosa hasta su propio laberinto donde cae sin poderse levantar porque no busca la ayuda de Vuestro Padre Celestial.  Vosotros no sabéis que Vuestra Madre hoy esta sufriendo amargamente porque todo lo que esta pasando en estos dias, donde para el cielo no hay hora, ni hay tiempo, no hay noche, no hay oscuridad, solo hay luz.

Vemos los Ángeles que rodean a cada criatura que hay en el mundo tratando de conducir el rebaño por el verdadero sendero donde la luz os conduce al Bien Amado y os desviáis, no obedecéis a la voz interna que os quiere apartar de ese camino que os lleva desgraciadamente hacia el abismo.  El hombre no quiere salvarse, pequeños, cometen y cometen los mismos pecados, los mismos errores todo el tiempo.

 Hoy Vuestra Madre sufre por una de las pequeñas criaturas que escogió el camino de abrazar la cruz, de ayudar a Jesús a cargar la cruz de todos los hombres que diariamente ofenden al Bien Amado y a Vuestra Madre Amantísima. Pero también el hombre hoy esta sufriendo las consecuencias de los pecados que ellos mimos  arrastran en sus vidas, como dijo mi amado Jesús en una ocasión: “No lloréis por mi Jerusalén, os he mandado a todos los profetas para que os instruyan en el camino del amor y vosotros no los habéis reconocido y seguís cometiendo errores, no escucháis la voz de vuestros corazones y de vuestra conciencia. 

Cada día hay más muerte por la naturaleza que arrastra consigo lo bueno y lo malo, recordad vosotros que el agua purifica pero también se lleva todo lo que obstruye el camino hacia el amor, hacia la paz, hacia todo lo que hace que todos los hombres se amen como el Bien Amado los amo. 

Mi Amado cargando su cruz os  decía, no lloréis por mi Jerusalén, llorad  por vosotros y por vuestras criaturas, los jóvenes están perdidos en la droga y el alcohol, en el vicio de la sexualidad,  ya no respetan ni siguiera el cuerpo y la sangre del Bien Amado en la Sagrada Eucaristía; allí donde está presente, donde os espera, donde con amor os ofrece cada día en el altar del sacrificio para que vosotros podáis santificar vuestras almas y vuestros corazones. 

La naturaleza seguirá cobrando todo el daño que el hombre le hace, seguirán las inundaciones arrastrando todo lo que encuentra por delante, seguirán las guerras entre los hombres matando inocentes, porque queréis llevar al hombre a un anticristianismo peor que el de los viejos tiempos, pero vosotros sabéis que cada cual, cada uno de vosotros arrastrará vuestra propia condena, esa condena que llevarais al abismo, o al encuentro del Bien Amado que es el Buen Pastor, que os espera a que vosotros rectifiquéis.

 Cada uno de vosotros podéis convertiros en misioneros en el camino, predicando la palabra del Bien Amado sin apartaros de la Luz que es Él advirtiendo a tiempo y a destiempo en todos los corazones para que os preparéis para el acontecimiento que se espera para la humanidad.

 El hombre quiere hacer un mundo, un mundo globalizado donde todo lo gobierne una sola cabeza que es la cabeza del maligno, el tiene siete, pero uno solo quiere gobernar y se acercan los tiempos donde el hombre tendrá que escoger el camino que quiere seguir, si seguir a Cristo en la Cruz o hundirse en la oscuridad abrazando al becerro  que está llevando a la humanidad a la destrucción al hambre y a la miseria.

 Pequeños, vosotros creéis que esa enfermedad que hay en estos dias en el mundo contaminando a todos los seres humanos no es producto, os lo dijo Vuestro Padre a través de la pequeña criatura; no es producto de los animales, es producto del mismo hombre, fabricado en esos pequeños laboratorios infernales  donde producen toda clase de bacterias, para esparcirla en los pájaros que vuelan (aviones) soplando y contaminando a la humanidad, porque para vosotros los hombres el mundo esta superpoblado, necesitan eliminar muchas criaturas, porque se creen dioses.

 Mientras más el hombre reniegue del único Dios que puede disponer de todas las cosas en la tierra que hizo con tanto amor para que el hombre se regocijara en ella, mientras que el hombre siga haciendo sus maldades, creyéndose más poderoso que el único Dios, seguirán sufriendo las consecuencias, de las aberraciones que el mismo hombre comete.

Vendrán tiempos difíciles y vosotros tenéis que prepararos con ese liquido maravilloso que hizo Dios (agua bendita), purificando el agua que vosotros bebéis,  guardando alimento que no se contamine ni se eche a perder, recordad que hay monjes que viven con vosotros, aunque vosotros no los veáis, ellos cosechan hierbas maravillosas que sirven para la salvación en los tiempos críticos, que se avecinan.  Podéis registrar, buscad, preguntad para que os preparéis para las grandes cosas que vendrán para la humanidad.

  Recordad siempre que os he dicho a través de la pequeña criatura, que las columnas de los santuarios se están derrumbando, las columnas son los apóstoles que Jesús mi Bien Amado preparó para que sirvieran al hombre en todo momento.

 Veréis vosotros llegar el momento en que el hombre querrá desbaratar con sus manos esos santuarios donde se regocija el Bien Amado en el vino y en el pan (Eucaristía).  Será el momento de que Dios mande las señales con sus trompetas a despertar los corazones de aquellos que están dormidos en la fe.

Para terminar, estad atentos pequeños míos a lo que Vuestra Madre Amantísima os dice, recordadle a la pequeña criatura que no tenga miedo para la misión que tiene que cumplir (misión en Ecuador), el Espíritu Santo siempre estará con ellos, y aquellos que vienen a este pequeño lugar,  pero grande en milagros, no se arrepentirán por haber venido porque se llevarán con ellos el manto de Vuestra Madre que los guiará y regresarán como pequeños corderitos buscando la paz y el amparo del Bien Amado.

                Os bendeciré y os tocaré para que cada uno de vosotros recibáis en vuestros corazones el cálido aliento del Espíritu Divino, que se encuentra en este pequeño lugar.  Os bendigo en el nombre del padre del Hijo y del Espíritu Santo. Amen

Mayo 25, 2009
 
(Ecuador)

                “Pequeña mía, Vuestro Padre Celestial, sabe cuanto te preocupa todo lo que pasa hoy en todos los pueblos  del mundo, pero antes de darte el mensaje a través de las Sagradas Escrituras quiero que sepas que no estoy ajeno a vuestra preocupación, quiero que registres lo que os dije en la Segunda de Timoteo Capitulo 4 Versículos 1-5: “Te conjuro delante de Dios y de Cristo Jesús, el cual juzgará a vivos y a muertos, tanto en su aparición como en su reino: predica la Palabra, insiste a tiempo y a destiempo, reprende, censura, exhorta con toda longanimidad y doctrina.  Porque vendrá el tiempo en que no soportarán más la sana doctrina, antes bien con prurito de oír se amontonarán maestros con arreglo a sus concupiscencias.  Apartarán de la verdad el oído, pero se volverán a las fábulas. Por tu parte, se sobrio en todo, soporta lo adverso, haz obra de evangelista, cumple bien tu ministerio.  Continua pequeña escribiendo lo que os digo en la Carta del Apóstol San Judas, Versículos 3-4:Carísimos, teniendo gran preocupación por escribiros acera de nuestra común salud, me he visto en la necesidad de dirigiros esta carta para exhortaros a que luchéis por la fe, que ha sido transmitida a los santos una vez por todas.  Porque se han infiltrado algunos hombre – los de antiguo prescritos  para este juicio – impíos que tornan en lascivia la gracia de nuestro Dios y reniegan del único Soberano y Señor nuestro Jesucristo. Continúa en los versículos 7-13: Así mismo Sodoma y Gomorra y las ciudades comarcanas, que de igual modo que estos se habían entregado a la fornicación, yéndose tras la carne extraña, yacen para escarmiento sufriendo el castigo de un fuego eterno.  En tanto que el mismo arcángel Miguel, cuando en litigio con el diablo le disputaba el cuerpo de Moisés, no se atrevió a lanzar justicia contra él sentencia de maldición sino que dijo solamente “Reprímate el Señor!”  Pero éstos ora blasfeman de todo lo que no entienden, ora se corrompen con lo que sólo naturalmente conocen al modo de las bestias irracionales. ¡Ay de ellos! Porque han entrado en camino de Caín y por salario de entregaron al error de Balaam y encontraron su ruina en la revuelta de Coré.  Ellos son las manchas de vuestros ágapes, cuando se juntan para banquetear sin pudor, apacentándose a sí mismos; nubes sin agua, arrastradas al capricho de los vientos; árboles otoñales sin fruto dos veces muertos, desarraigados; olas furiosas del mar que arrojan la espuma de sus propias ignominias; astros errantes, a los cuales está reservada la oscuridad de las tinieblas para siempre. Amen