Mensaje Mensual de Nuestra Madre Amantísima para todos sus hijos
Febrero 13, 2009

                “Mis pequeñas criaturas, tan dichosa es vuestra Madre Amantísima cuando viene al encuentro de cada uno de vosotros en este pequeño lugar.  Este lugar es donde siempre se reúnen criaturas que muchas veces vienen con el corazón abierto para recibir todas las bendiciones que vuestra Madre Amantísima trae en Sus Manos para repartiros a cada uno de vosotros para que la llevéis en cada uno de vuestros corazones. 

“Muchos vienen a este pequeño lugar ijo y del para buscar pruebas, para buscar verdades que no existen ni siquiera en vuestros corazones.  Esas criaturas que vienen buscando la Verdad en un lugar determinado de vuestra Madre Amantísima, no reconocéis que en cada uno de vuestros corazones vuestra Madre se regocija y está aquí cada vez que vosotros imploráis al Espíritu Divino de Dios, para que os traiga sanación al cuerpo o sanación en vuestras almas. 

“Vuestra Madre ya está acostumbrada a los caprichos de las pequeñas criaturas que van por el mundo muchas veces en diferentes partes donde vuestra Madre os aparece para traeros el Mensaje del Bien Amado.  Muchos van a lejanos lugares buscando bendiciones y muchas veces vuestra Madre Amantísima os trae la Luz cerca de donde cada uno de vosotros vivís. 

“A vuestra Madre le gusta traer los Mensajes del Bien Amado cuando el Espíritu Santo se haya presente en el corazón de la pequeña criatura.  Ella ama al Espíritu Santo como cada uno de vosotros lo debéis amar.  El Espíritu Santo, Mis pequeñas criaturas, se derrama en cada uno de vuestros corazones y os trae la paz, el amor, las bendiciones, la salud y la caridad que el Bien Amado os trae a través de vuestra Madre Amantísima en todas partes donde aparece.  Muchos no los practican, pero quiero que vosotros recordéis siempre esto que os diré.  La fe está injerta en cada uno de los corazones del ser humano por que es la fe, la que os hace, que el Espíritu Santo logre el milagro que vosotros necesitáis.  La esperanza es en aquello que vosotros no veis junto con la fe, y también esa esperanza de recibir la bendición de vuestro Padre a través de las pequeñas manecillas de la criatura que os toca a cada uno de vosotros.

Los dones que doy a las pequeñas criaturas que caminan en el sendero de la luz, son la fe, la esperanza, la caridad.  Aquel que recibe el don de la caridad, el Bien Amado se regocija en vuestros corazones, y entonces en el momento de haber recibido ese milagro de amor que os da el Divino Maestro, es cuando cambian vuestros corazones, y os dais  de cuenta que sin la caridad nada es posible. 

“Si cuando cada uno de vosotros recibís una bendición y la sanación de cuerpo y  alma, en ese mismo instante el Espíritu Divino cambia vuestra forma de ser.  Fijaos después, el que recibe al Divino Maestro, al Divino Señor, al Buen Pastor, al Peregrino Emigrante, que busca en las almas y en cada uno de vuestros corazones, esa necesidad que traéis para recibir, entonces os convertís en donadores de caridades en todas partes.  Lo que os quiere decir vuestra Madre es que estáis obligados a dar monedas aquí y allá, no, las caridades no se reflejan en el buen vivir de cada uno de vosotros, en la caridad que vosotros sentís en vuestros corazones por cada uno de los seres humanos con los que vosotros camináis en este gran mundo, en este orbe en que Dios ha hecho para que todos os améis como Él os amó, y para que cada uno os convirtáis en un Rosario, en un Rosario ambulante que ese Rosario que vosotros oráis en los lugares de apariciones, en las vigilias, en los santuarios, donde el Santísimo Sacramento está expuesto para escuchar cada una de vuestras plegarias, vosotros os convirtáis en oraciones perennes en vuestros corazones, en el Rosario continuo que mentalmente vosotros podéis implorar donde quiera que vosotros estéis.

“No tenéis solamente que estar en un santuario, o en una aparición, sino en cada lugar donde vosotros estéis, en vuestros corazones, vosotros podéis hacer un Rosario, sino os acordáis de los Misterios que vuestra Madre os regaló a través  Santo Domingo de Guzmán, y a todas aquellas criaturas que oran el Rosario no tenéis que tener el Rosario en vuestras manos. Hay un Misterio muy poderoso que vosotros podéis orar en vuestros corazones, son las tres Ave Marías del Ángelus que podéis orar en cada lugar, en cada momento mentalmente, un Padre Nuestro, un Gloria, es el Ángelus de vuestra Madre Amantísima que con regocijo os dijo cuando visito a Santa Isabel y reconoció en el Vientre de vuestra Madre al Bien Amando, cuando ella misma, Santa Isabel, tenía en su vientre a Juan el Bautista, que bautizaba después con agua y quien dijo muchas veces, yo os bautizo con agua, pero el que viene detrás de Mi bautizará en el Espíritu, por que Él es el elegido y yo no tengo la potestad ni siquiera de abrocharle las correas de Sus Sandalias. 

“Pequeños Míos, cada uno de vosotros podéis orar en cualquier lugar que vosotros os encontréis, porque los tiempos son muy agresivos para la humanidad, lo que se avecina para el mundo no es una cosa con la que vosotros podéis  jugar, ni en vuestra mente deciros a vosotros mismos ah! esto no pasará.  Pues os voy a recordar algo muy importante.  Muchas personas que no estaban en este lugar cuando vuestro Padre Celestial os habló a través de la Virgen María y os dijo: ‘Orad, porque muchas criaturas partirán antes que finalice este mes y se elevaran a las alturas.  Orad por ellas para que no vayan al Sheol.  Orad, porque muchas criaturas ancianas, jóvenes y pequeñas se levantaran y se elevaran.  Eso ha ocurrido, vosotros que registráis todos esos medios de comunicaciones modernas que vosotros tenéis, veréis cuantos acontecimientos dolorosos han ocurrido y cuantas criaturas han dormido el sueno eterno. 

“Vuestra Madre viene a traeros un Mensaje apocalíptico, para que vosotros no os asustéis, vuestra Madre os trae el Mensaje de advertencia para que cada uno de vosotros os preparéis en muchas formas, os preparéis en la Bendición Divina del Padre Celestial a través de Jesús en el Santísimo Sacramento del Altar.  En esa Sagrada Eucaristía que os dejo, en ese pequeño pan convertido en el Cuerpo de Jesús para que vosotros alimentéis el Espíritu, y que hoy lo profanan donde quiera que vayan, le toman en las manos.  No dobláis las rodillas cuando Él os dice: ‘Ante Mi, toda cerviz debe bajar y toda rodilla debe doblarse, porque Yo Soy el Principio y el Fin, el Alfa y el Omega, ya que vosotros profanáis todos los días de vuestras vidas en las concupiscencias, en las fornicaciones, en escoger pareja como los animalitos y no compañeros, para caminar de la mano bendecidos por Jesús de Nazaret en el Sacramento del Matrimonio.’  Cuantas profanaciones hacéis los hombres en este día cada vez que las mujeres, en vez de proteger a las pequeñas criaturitas en sus vientres, las abortan, las asesinan.  Cuantas mujeres hay que ruegan al Padre Celestial por tener un hijo, y cuantas hay que los asesinan en sus vientres, sin darle el derecho de nacer. 

“Es el Espíritu Santo, pequeños Míos, es quien habla a través de la pequeña criatura que no tiene conocimiento de nada.  Ella es especial porque nada lee, nada ve, nada escucha para no alimentar su mente de cosas ya dichas.  Ella le gusta ser ella, y que Jesús se manifieste y vuestra Madre.  Como vuestra Madre y como Jesús quieren, no como ella quiere, sino como quiere Él.  Es muy cabeza dura, pero el Espíritu Santo la cobija, la acompaña donde quiera que va sembrando el amor, las caricias a aquellos desheredados de la fortuna de la salud, de las penas del corazón y del alma, siempre tiene una palabra para cada una de las personas que visita, ella es un alma errante.  Aunque nunca quiso siempre lo dice, que ella mejor sería si viera a los demás y no fuera protagonista de lo que vuestra Madre os ha sembrado en su corazón. 

“Recordad que todas las pequeñas que el Bien Amado toma de la mano para que lo sigan tienen que sufrir, en este mundo todo lo que el Bien Amado sufrió porque Él prueba a Sus elegidos con el dolor, y ahí está el Espíritu Divino.  El Bien Amado escoge a Su criatura, ella no escoge al Bien Amado.  Muchas veces la pequeña sufre todo el tiempo grandes dolores que vosotros no os imagináis.  Fueron los dolores del Bien Amado que ella lleva consigo acuestas, pero así será hasta que el Padre Celestial cierre sus ojos y la haga dormir.  Aquellos que caminan con ella en este deambular de dolor de oscuridad y de luz, también cogen los aletazos del dolor para que sepan todo lo que el Bien Amado sufrió por cada uno de vosotros en este mundo, y que hoy el hombre no se atreve a reconocer.  Pues ahora vendrá el tiempo en que tendrán que acudir a los grandes santuarios, a los grandes templos de oración, para orar para que no venga para el mundo lo que está escrito que vendrá.

“Recordad que el Espíritu Santo se manifiesta en el fuego, en el viento, y en el agua.  Grandes inundaciones, grandes vientos, grandes fuegos que se tragan la faz de la tierra, todo lo que el Bien Amado hizo con amor, pero que el mismo hombre proyecta todas las cosas que ocurren en la humanidad por culpa del mismo hombre, pero si cada uno de vosotros oráis en vuestros corazones con verdadera fe, verdadero amor, Jesús escucha cada gemido de los que a Él  imploran con verdadero amor, verdadera fe y verdadera obediencia.

                 “Os bendigo, pequeños Míos, en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amen

                “Escribe en San Juan, Capitulo 14, Versículos 1-14: ‘No se angustien ustedes.  Confíen en Dios y confíen también en mí.  En la casa de mi Padre hay muchos lugares donde vivir; si no fuera así, yo no les hubiera dicho que voy a prepararles un lugar.  Y después de irme y de prepararles un lugar, vendré otra vez para llevarlos conmigo, para que ustedes estén en el mismo lugar en donde yo voy a estar.  Ustedes saben el camino que lleva a donde yo voy.  Tomas le dijo a Jesús: ‘Señor, no sabemos a donde vas, ¿Cómo vamos a saber el camino?  Jesús le contesto: Yo soy el camino, la verdad y la vida.  Solamente por mí se puede llegar al Padre.  Si ustedes me conocen a mí, también conocerán a mi Padre; y ya lo conocen desde ahora, pues lo han estado viendo.’  Felipe le dijo entonces: ‘Señor, déjanos ver al Padre, y con eso nos basta.’  Jesús le contesto: ‘Felipe, hace tanto tiempo que estoy con ustedes, ¿y todavía no me conoces?  El que me ve a mí, ve al Padre; ¿por qué me pides que les deje ver al Padre?  ¿No crees que yo estoy en el Padre y el Padre está en mí?  Las cosas que les digo, no las digo por mi propia cuenta.  El Padre, que vive en mí, es el que hace su propio trabajo.  Créanme que yo estoy en el Padre y el Padre está en mí; si no, crean al menos por lo que hago.  Les aseguro que el que cree en mí hará también las obras que yo hago; y hará otras todavía más grandes, porque yo voy a donde está el Padre.  Y todo lo que ustedes pidan en mi nombre, yo lo haré, para que por el Hijo se muestre la gloria del Padre.  Yo haré cualquier cosa que en mi nombre ustedes me pidan.’ ”

Febrero  6,  2009 Noche de Vigilia

                “Mis pequeños, Jesús vino al mundo para traeros esa luz que tanto necesitaba la humanidad, para poder salvar al mundo de las atrocidades que en aquellos tiempos se convertían en crímenes horrendos y que hoy vosotros los hombres estáis viviendo esas mismas condiciones, abusando de criaturas inocentes, no dejándolas nacer.  Vuestra Madre Amantísima, a cada niño abortado, a cada niño asesinado  lo recibe en sus brazos, y ora porque el Bien Amado pueda un día perdonar a las criaturas que son capaces de asesinar a un niño en su vientre, no dejándolo nacer.

                “Vosotros, pequeños Míos, no sabéis cuanto dolor sufre vuestra Madre Amantísima cuando una criatura es arrancada del vientre de su madre y es asesinada, sin darle el derecho de vivir, donde podría estar más protegida la criatura allí en ese santuario que tiene que ser el vientre de la madre.  Como fue, como dijo ‘Si’ al verbo hecho carne en su vientre, pero hoy las mujeres no son capaces ni siquiera de sentir en su vientre esos latidos de la criatura que a veces las hacen abortar llenas de vida,  tirándolas en cualquier parte para que mueran, para que el hombre después pueda hacer cantidades de experimentos. 

                “Hoy, pequeños Míos, he venido aunque la pequeña no está bien, pero cuando yo ascienda de nuevo, ella quedará mejor. 

                “Recordad siempre que os digo que mi pequeña es desobediente, para recibir a Vuestra Madre, vosotros no sabéis el sacrificio que ella hace para que Vuestra Madre pueda traer el Mensaje a cada uno de vosotros que se que esperáis con ansias para que Vuestra Madre os diga las cosas que están por venir.  Vuestra Madre, está cansada de aguantar las Manos del Bien Amado, para no dejar caer Su Justicia en este mundo, lleno de vicios, de maldad, y de corrupción. 

                “Grandes acontecimientos se avecinan para la humanidad.  Vosotros no os imagináis, lo que viene, no solo para este pequeño país, comparado con la grandeza del mundo, ni para aquellos que aborrecen y persiguen a la Cristiandad, que quiere decir cristianos cobijados en el manto de Vuestra Madre Amantísima, quien trata de reunir a sus hijos en todas partes, para hacer que el Bien Amado forme un nuevo mundo de amor, de caridad, de fe, de sacrificio hacia todos los seres humanos.

                “Vosotros no sabéis lo que significa haber aceptado al hombre que gobierna este gran país, oh! pero pagando, pagando denarios a todos los países, propiciando que todas las mujeres aún siendo niñas, se arranquen de sus cuerpos las criaturas que concibieron en medio de amores tormentosos sin ni siquiera estar bendecidos en la fe, por que hoy, pequeños Míos, el hombre y la mujer se apacientan, no bendicen esa pareja cuando se aman, sino que se juntan como los animales, buscan pareja como los animales, sin estar bendecidos por Dios.  Procrean criaturas que no pidieron venir al mundo, y los que nacen los maltratan, sin conciencia, sin amor, como puede ser que un gobernante en este mundo tan corrupto, esté de acuerdo en matar las criaturas en el vientre de la madre, como puede el hombre permitir tantos asesinatos?  Son millones de niños que no llegan ni siquiera a nacer.

“Vuestra América se convulsionará, pequeños Míos.  Vosotros veréis como aquellos que no adoran ni veneran la Cruz del cristiano, la Cruz de los bautizados, la Cruz de los creyentes, la Cruz del amor; porque cada uno de vosotros formáis una Cruz, nacieron con ella, y con ella volverán de nuevo al Padre.

“Veréis vosotros como muchos gobernantes rodarán por la pendiente, como si fueran un tumulto de agua, de rocas. 

“Vosotros no os imagináis pequeños míos, como vuestra Madre sufre y llora, llora sangre en muchas partes el mundo, no os imagináis como sufre, cuando ve tanta miseria, tanta maldad, tanta corrupción.  Como se degenera la mujer, como se degenera el hombre.  Vosotros no sabéis cuanto sufre vuestra Madre, no por ella sino por todos vosotros, por todos los hombres.

“Habrá muchas muertes en esta humanidad corrupta, en estos pueblos que no soportan oír hablar del Crucificado, no soporta ver cuantos crímenes hay en el mundo. Pequeños Míos, en el nombre de un Dios que no conoce vuestra Madre, de un Dios que hizo este paraíso terrenal para el regocijo de todos los hombres  y que hoy se han convertido en grandes volcanes que cuando entran en erupción arrastran todo lo que encuentran a su alcance, así se va a destruir la humanidad y el hombre no va a tener tiempo de arrepentirse de todo el daño que hace hasta la propia naturaleza, por eso es que vuestra Madre llora y sufre.

“A vosotros vuestra Madre solo os puede decir que estaré pareciéndome en todas partes del mundo hasta que mis brazos recojan y reúnan al nuevo Jerusalén.  Vuestra Madre seguirá llamando a sus hijos, no solo los que están fuera del alcance de vuestros ojos, sino de aquellos que se cubren con sotanas, pero que se han olvidado del verdadero mensaje que está escrito, no solo para vosotros sino para las SIETE IGLESIAS.

“Hay entre el hombre una frase que ellos llaman nueva era; Jesús no la conoce, ni una tilde se puede borrar de lo que está escrito en las Sagradas Escrituras, no de la nueva era, sino la del antiguo rito que debe de volver a los grandes santuarios donde las columnas tiemblan, cada vez que cambian todas las oraciones y los mensajes que están escritos en ella.

“Muchos acuden a esos grandes santuarios, el hombre las llama iglesia.  Iglesia sois todos vosotros, cuando os bautizáis, y recibís el Espíritu Divino de Dios os convertís en iglesia.  Pero la iglesia no es para que os deis golpes de pecho, sino para recordaros en todo momento, que todos sois hijos de un solo padre, del Padre Celestial, el que viene corrigiendo a sus hijos en el mundo, para que todos vuelvan de nuevo a la luz, y no sigan en la oscuridad.

“Os bendigo pequeños, en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.  Amen.”

Febrero 18, 2009

                “Pequeña, vamos a registrar las Sagradas Escrituras.  Escribe en Eclesiástico Capitulo 14, Versículo 1:  ‘Dichoso el hombre que no sufre por lo que dice, y a quien la conciencia no se acusa.  ¡Dichoso el hombre al que no le falta ánimo, ni ha perdido la esperanza!’

                “Continua sobre el uso de la riqueza: ‘El tacaño no merece la riqueza; no merece tener oro, el avaro, es el que es tacaño consigo mismo.  Acumula para otros.  Gente extraña gozará de sus bienes.’ 

                “En el Salmo 14, Versículo 4, os digo:  ‘No tienen entendimiento los malhechores, los que se comen a mi pueblo como quien come pan, los que no invocan el nombre del Señor.’

                “Continua en Eclesiástico Capitulo 14, Versículo 5: ‘El que es tacaño consigo mismo ¿con quien será generoso? En si mismo lleva  el castigo de su tacañería.’

                “En el Verso 8 os digo: ‘Mala persona es el avaro; vuelve la vista sin prestar a nadie.  El acaparador todo lo que tiene le parece poco.’ 

                “Continua en el Versículo 10: ‘El avaro mira el pan con ansia, pero no pone nada en su mesa.  Hijo mío, si tienes algo, úsalo para tu provecho y sé generoso con Dios.  Recordad que la muerte no tarda.  Nadie te ha dicho cuando haz de morir.’ Amen.

                “Soy vuestro Padre Celestial, tu Divina Misericordia.”

Febrero 20, 2009

                “Pequeña Mía, dedícate a hacer el bien no solo delante de Dios, hazlo también delante de los hombres  No tengas miedo de los hombres ni de su desprecio, tampoco de sus burlas, si lo que haces es para que Dios te ame y te cuide.

                “El hombre debe de salvarse sea como sea y cueste lo que le cueste, lo único que os debe interesar, es agradar al Señor y contribuir a la gloria de Dios.  Pequeña no trabajes para el hombre; ellos no entienden, no dan recompensa, solo Dios en el cielo os dará la vida eterna.  Tu pequeña, dedícate, no a vivir como los hombres en ese mundo tan apóstata.  Vive como criatura que eres; sé buena y amable, cariñosa y alegre como te formé, haz el bien a todo el que puedas, aunque sean tus enemigos; siempre sé, pequeña, como vuestro Padre Celestial te ha ensenado, humilde, sincera, nunca hables mal de los demás, de esta manera sabrás vivir en estos tiempos y serás un buen cristiano.  Siempre recuerda que no puedes ser vanidosa; haz siempre el bien pensando en Dios y en tu prójimo, cubre los pies del descalzo, el cuerpo del desnudo, porque en ellos siempre encontrarás a Dios. 

                “Te amo soy vuestro Padre Celestial tu Divina Misericordia.  Amen  Bendigo a todo el que comparta contigo este camino de amor. 

                “Orad por el mundo que se derrumba por la maldad. Amen.”

Febrero 22, 2009

                “Hija Mía, quiero hablar quien es el Espíritu Santo Divino y como se manifiesta en el hombre.  Dios manifestó su gloria cuando se engendró en una Virgen para hacerse hombre en el vientre Virginal de Vuestra Madre Amantísima la Virgen María.  Se engendró como Espíritu y como Espíritu Salió sin manchar la virginidad de la Virgen María.  Se hizo Verbo, se hizo carne para darle un Rostro a Su Espíritu, que no lo tenía.  Jesús que es el mismo Dios se engendró en María y se hizo hombre.

“Caminó con el hombre en el mundo de ayer, con los hombres de aquel tiempo, y un día frente a Juan el Bautista, hijo de Santa Isabel y primo de Jesús.  Y dijo Juan Bautista a quienes le seguían para ser bautizados. ‘Yo bautizo con agua pero el que viene detrás de mí bautizará con el Espíritu Divino de Dios, y yo no soy capaz de abrocharle el cordón de sus sandalias.’  Luego se escuchó una voz cuando una paloma se posó en la cabeza de Jesús y dijo: ‘Este es mi Hijo Amado en quien me glorifico.’

“¿Por qué vosotros creéis que el Espíritu en forma de paloma se posó en Jesús? Porque fue una paloma blanca, que significa paz.  La paloma no canta, susurra para cantarle a sus polluelos.  La paloma es fiel, susurra siempre, no es escandalosa, no hace ruido cuando llega a su nido. 

“El Espíritu Santo no hace ruido, gime dentro del que Dios elije para que gima dentro y le avise que está ahí pero muchos son los escogidos y pocos los elegidos.  Porque muchos no siguen lo que el Espíritu Divino os dice internamente.  No lo escucháis, porque aceptarlo sería decir si como María Vuestra Madre Amantísima y vivir en un mundo de renuncia y de amor hacia todo lo que Dios os indique para seguirlo en un camino de amor y de sacrificios. 

“No todos sois obedientes al llamado de Jesús y es por eso que no a todos Jesús os habla a través del gemido en vuestros corazones.  Jesús conoce a sus criaturas y sabe quien se calza sus sandalias y quien se cubrirá con la armadura del Espíritu Santo, y quien lo seguirá. 

“Os amo, mi pequeña soy vuestro Padre Celestial vuestra Divina Misericordia.  Amen.”

Febrero  22, 2009 Continúa

“Pequeña Mía, escribe en Hebreos, Capitulo 10, Versículos 26-31:  “Porque si pecamos a sabiendas después de haber reconocido la verdad, ya no nos queda hostia que ofrecer por los pecados, sino antes bien una horrenda expectación del juicio y del fuego abrasador, que ha de devorar a los enemigos de Dios.  Uno que prevarique contra la ley de Moisés, y se haga idólatra, siéndole probado con dos o tres testigos es condenado sin remisión a muerte.  Pues ahora, ¿Cuánto más acerbos suplicios, si lo pensáis merecerá aquel que hollare al Hijo de Dios, y tuviese por vil e inmunda la sangre divina del Testamento, por la cual fue santificado, y ultrajare al Espíritu Santo autor de la gracia?  Pues bien conocemos quién es el que dijo: A mí está reservada la venganza, y yo soy el que la ha de tomar.  Y también: El Señor ha de juzgar a su pueblo.  Horrenda cosa es por cierto caer en manos del Dios vivo.’

“Os amo, pequeños Míos. Soy vuestro Padre Celestial, vuestra Divina Misericordia.  Amen.”

Febrero 28, 2009

                “Hija Mía, haz cada vez que podáis toda la caridad que te permita tu situación y toda la caridad que tu corazón te indique.  No dejéis para más tarde lo que puedas hacer mientras viváis, porque nada es más importante para Dios, que lo que tu puedes hacer por los más necesitados.  La bondad del hombre es más importante que muchas cosas que no son necesarias porque a través de la caridad que tu tengas, pequeña Mía, hacia las demás criaturas, es como vuestro Padre Celestial te puede usar para con los demás hermanos en la fe. 

                “La vida, pequeña, es muy breve, la vida en el cielo es infinita, es eterna.  El hombre tiene que expiar sus pecados, ¿como debe hacerlo? Dando limosna a quien lo necesita.  Dios está en el rostro del pobre, del enfermo, del desposeído.  Recordad que así pensaba San Agustín. 

                “Hija Mía, no sufras cuando te ofendan, cuando te lastimen, cuando el hombre te odia y te maltrata. ¿Sabes tu porqué se alejan de ti y te lastiman?  Porque amas a Dios y a María.  Cuando te acercas a Dios y haces las cosas que Él ama, el hombre se aparta de ti.  Confía pequeña, yo siempre estoy atento junto a ti, aunque muchas veces no me sientes. 

                “Te amo.  Soy vuestro Padre Celestial vuestra Divina Misericordia.  Amen.”  

El Mensaje de Febrero 28, 2009 Continúa

Revelación: “Hija Mía, os quiero explicar lo que significa para el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.

“El ayuno es un acto de contrición, donde tú  sin ningún intermediario, reconoces todos tu pecados veniales y los que te hacen algunas veces culpable ante los ojos de Dios.  El ayuno que vosotros los hombres hacéis algunas veces es como para limpiar muchos actos de vosotros que no están de acuerdo con Dios.  Os dice Jesús, que es Dios mismo, que el ayuno que a Él le agrada, es compartir con los pobres, aunque sea una vez por semana, llevándoles alimentos que a vosotros os sobran, por tener en abundancia.  El ayuno es orar porque la justicia sea digna para todos.  Ayunar es visitar un enfermo en los hospitales, orar por él, es ir a visitarlos en un asilo de ancianos, a un hogar de niños abandonados.  Es pedir que la justicia de Dios  se cumpla, condenando a los criminales, no al inocente abusado por los hombres que hoy manejan las leyes.  Orad por los presos y por los abusados que son inocentes. 

“Escribe en Isaías Capitulo 58, Versículos 5-12: ‘¿Creen que el ayuno que me agrada consiste en afligirse, en agachar la cabeza como un junco y en acostarse con ásperas ropas sobre la ceniza?  ¿Eso es lo que ustedes llaman ‘ayuno’ y día agradable al Señor?  Pues no lo es.  El ayuno que a mi me agrada consiste en esto: En que rompas las cadenas de la injusticia y desates los nudos que aprietan el yugo; en que dejes libres a los oprimidos y acabes, en fin, con toda tiranía; en que compartas tu pan con el hambriento y recibas en tu casa al pobre sin techo; en que vistas al que no tiene ropa y no dejes de socorrer a tus semejantes.  Entonces brillará tu luz como el amanecer y tus heridas sanarán muy pronto.  Tu rectitud irá delante de ti y mi gloria te seguirá.  Entonces, si me llamas, yo te responderé; si gritas pidiendo ayuda, yo te diré: “Aquí estoy.”  I haces desaparecer toda opresión, si no insultas a otros no les levantas calumnias, si te das a ti mismo en servicio del hambriento, si ayudas al afligido en su necesidad, tu luz brillará en la oscuridad, tus sombras se convertirán en luz del medio día.  Yo te guiaré continuamente, te daré comida abundante en el desierto, daré fuerza a tu cuerpo y serás como un jardín bien regado, como un manantial  al que no le falta el agua.  Tu pueblo reconstruirá las viejas ruinas y afianzará los cimientos puestos hace siglos.  Llamarán a tu pueblo “reparador de muros caídos,” reconstructor de casa en ruinas.’  Amen.”