Mensaje Mensual de Nuestra Madre Amantísima para todos sus Hijos
Marzo 13, 2006
“Mis pequeños, Mis lindas criaturas, muchos
trabajos sufre vuestra Madre Amantísima en el día de hoy para poder llegar a
este pequeña lugar donde vuestro Amado Jesús os da el privilegio de que
vuestra Madre os dé el Mensaje que guarda en Su Corazón para cada una de Sus
criaturas.
“Vuestra Madre habla en diferentes partes del
mundo para tratar de convertir a las pequeñas criaturas que están alejadas del
Sagrado Corazón del Bien Amado.
“El hombre no acaba de entender lo grande que
es hacer aparecer a la Madre Amantísima en cada oración del Rosario con que
vosotros contribuís para que Ella os bendiga y manifieste la gloria del Bien
Amado en este lugar.
“Hoy han venido muchas personas, muchos hijos
alejados del verdadero significado de este tiempo.
Este tiempo es un tiempo de oración y espera, esa espera donde el Bien
Amado fue probado en Su Veracidad, en Su Mística, en Su Espiritualidad Sagrada
como Hijo de Dios. Fue tentado y está
siendo tentado duramente para que le demuestre a la malignidad que
verdaderamente el Bien Amado existe. Él
es Verdad, Él es Luz, Él es Poder, Él es Gloria y Él es Sabiduría para
darles ayuda a las pequeñas criaturas que no entienden lo que está escrito en
las Sagradas Escrituras. Él os
habla a vosotros a través de revelaciones, de alocuciones que la Madre Amantísima
os brinda para que os acerquéis a Él.
“El misterio de la Cruz es un misterio Divino
donde Dios, convertido en Hijo, os ofrece Su Sangre, Su Cuerpo, Su Agua de Lagar
de Su Manantial de Gloria para que vosotros os alimentéis y para poder
salvarlos.
“Vuestra Madre Amantísima sufre el Calvario y
sube espiritualmente al regazo de Jesús, de Su Bien Amado en la Cruz por ser la
más pequeña de Su siervas a rendirle honor y gloria y a recibir el agasajo de
Su Corazón herido por todos vosotros.
“No creáis que Jesús murió sólo una vez en
la Cruz, ya que Jesús muere diariamente en la Cruz cada vez que uno de Sus
hijos se aparta y comete aberraciones sexuales, aberraciones cuando se cometen
abortos, aberraciones cada vez que asesinan a un inocente.
“Vuestra Madre llora lágrimas de aceite
bendito para que cuando cada uno de vosotros la toquéis, recibáis Su bendición.
Jesús, Mis pequeñas criaturas, muere en la Cruz cada día en el Santísimo
Sacramento del Altar cuando el hombre no se prepara confesándose y doblando
rodillas ante Él para recibir Su Cuerpo dignamente en la boca y por los únicos
que la pueden dar que son los sacerdotes, los pastores que os dejó para
conducir al rebaño perdido y desviado.
“Jesús, Mis pequeños, muere en la Cruz cada
vez que ve a los hombres acudir a los sagrados templos y no les dan a los
sacerdotes la jerarquía que verdaderamente merecen.
Ellos por temor tienen que ocultarla en lo más profundo de su ser para
no ofender a hermanos de otros cultos religiosos que acuden a la verdadera
Iglesia donde está el Santísimo expuesto, el Cuerpo y la Sangre de Él.
Todo ha cambiado. Los templos
están vacíos, la Cruz alejada del altar y el sacerdote da el Cuerpo en las
manos a los feligreses que van a recibirlo.
“La Verdad está escrita en las Sagradas
Escrituras. Todo aquel que toma la
Sagrada Eucaristía indignamente la toma para su maldición y su desgracia.
“Nadie entiende lo que significa ese pedazo de
pan que os ofrezco en el Santísimo Sacramento.
Cada uno de vosotros os condenáis cuando la tomáis indebidamente.
“Seréis testigos de todo lo que vendrá para
el mundo en los Últimos Tiempos que se acercan a pasos agigantados para la
humanidad.
“Hoy vosotros habéis convertido este mundo en
un mundo lleno de maldades, de avaricia y de apostasía.
Después de haber sido bautizados en el altar del Sacrificio, se alejan
para abrazar cultos que verdaderamente no hablan por medio de las Sagradas
Escrituras. Todo el que tenga oído
que entienda. Llegará el momento en
que vosotros no encontrareis lugar donde poder ofrecer el Sacrificio de
Consagración y entonces será ese momento donde vosotros recibiréis lo que está
escrito para el Final de los Tiempos.
“Arrepentíos y volved los ojos a Dios de la
Mano de vuestra Madre Amantísima, que os traigo para el regocijo de cada uno de
vosotros. Todos aquellos que
enderezan el camino y dejen de abrazar la oscuridad serán salvos y a nada le
deben tener miedo porque nada les pasará.
“El Cordero de Dios que quita el pecado del
mundo se cobijó en el Vientre Inmaculado de vuestra Madre y vino al mundo a
morir en la Cruz por los pecados de cada uno de vosotros.
A todos os pediré cuentas de vuestras acciones cuando estéis en la
presencia del Señor.
“Orad, orad, Mis pequeñas criaturas.
Orad el Rosario en familias, es el instrumento que tenéis para pisotear
la cabeza de la malignidad que se regocija en los corazones de los seres humanos
tratándolos de alejar de la Iglesia Verdadera.
“Orad, orad con vuestras familias, reunid a
vuestros hijos, a vuestros esposos. No
tenéis que tocar a la puerta de nadie, tocad en las puertas de los corazones de
Mis pequeñas criaturas que se encuentren reunidas y recibiréis con cada cuenta
que oréis del Rosario el verdadero amor que os traigo a través de Él.
“Orad, Mis pequeños.
Orad, orad, orad.”